27/11/09

Mi vestido de novia cont (...)



CAPÍTULO II

Cumpliamos un año de nuestra relación y decidimos festejarlo, donde más, en Cancún. ¿Recuerdas amor? Era un hotel hermoso y la habitación no podré olvidarla jamás. Llegamos e intentaste distraerme mientras abrias la puerta. Entramos y ví en el suelo un camino de rosas que llegaban hasta la cama y un letrero enorme pegado en la pared que decía ------------TE AMO PRINCESA!!------- ; en la cama, formado con petalos de rosas, un corazón. Todo el cuarto estaba alumbrado con velas y en el balcón una hermosa mesa servida para dos con velas en medio y un vino enfriandose y esperando por nosotros. Mi emoción fue tanta que no pude evitar llorar (lo siento, sabes como soy de sentimental... ves! he vuelto a llorar con solo acordarme.)
Mientras cenabamos Magret de pato en salsa de mango (que rica receta no?) veíamos las olas del mar y la luna que nos alumbraba y se hacia complice de nuestro amor. Recordamos momentos tiernos de ese nuestro primer año juntos que, a nuestro ver, parecían haber pasado mil años juntos. Sonaban de fondo canciones escojidas por ti especialmente para ese día y conforme pasaba cada una de ellas nos traían recuerdos gratos... De repente te paraste frente a mi, tomaste una guitarra que estaba detrás de las cortinas y, parado frente a mi, cantaste una canción que es uno de mis mas bellos recuerdos que siguen presentes como si estuviera sucediendo:

"... se te nota, tu puedes negarlo mil veces pero se te nota; lo leo en tus labios si sonries, lo gritan las cosas que me dices, se te nota. Si me tocas tu piel se eriza de deseo y luego me provocas, lo veo cuando tiembla tu boca y tu cuerpo se quiebra en suspiros, te acercas peligrosamente a mi boca. A que no aguantas la temperatura y luego me devoras hasta enloquecer, a que te tientas cuando nos rozamos cayendo enredados como juez y rehén. A que no puedes resistir al torbellino en tu latir, a que todo me lo das, ¿a que pides mas?...Te lo juro no hay nada mas bello en el mundo que el deseo puro ardiendo en tu sangre encendida, buscando la fruta prohibida, llevandome a lo mas profundo de tu vida.A que no aguantas la temperatura y luego me devoras hasta enloquecer, a qe te tientas cuando nos rozamos cayendo enredados como juez y rehén. A que no puedes resistir al torbellino en tu latir, a que todo me lo das, ¿a que pides mas?... No vas a parar, te dejas llevar muy dentro de mi, muy dentro de ti nos quema este amor de fuego..."

Terminaste de cantar, te arodillaste y me dijiste: Nena, hemos pasado por tantas cosas en este año y aún así seguimos en pie y con todo el amor del mundo quiero pedirte que te cases conmigo, ¿qué dices?--- Mis ojos se llenaron de luces y destellos de alegría que no pude expresar con palabras... no podía hacer nada más, me habías atrapado y sorprendido, jamás lo imaginé. ¡Mi sueño hecho realidad! Acepté por supuesto, lo demás es historia no? (ja, ja, ja.)

A la mañana siguiente desperté con los rayos del sol calentando las sábanas y cuando abri los ojos el desayuno del mismo lado donde estabas tú, mirandome. Un beso de buenos días y un te amo fueron suficientes para que el día comenzara perfecto. Prendimos la televisión y desayunamos mientras veiamos una pelicula. Nos metimos a bañar, nos vestimos y salimos a caminar por la playa. Recuerdo como caminamos por toda la orilla de la playa y no había nadie a nuestro alrededor, fue mágico. La llegada de las olas a la orilla mojaban mis pies y la brisa del mar acariciaba mi cabello. Me abrazaste, me cargaste y gritaste tan fuerte ---- TE AMOOO!!--- y ese grito volvió nuestro amor infinito, inmenso y profundo como el mar. Todo era perfecto, eramos perfectos.

- Si, fue un viaje inolvidable nena.
- Y lo que siguió fue aún mejor no lo crees?



CAPITULO III

Comenzamos a planear la boda empezando, claro está, por la fecha. Después de varias platicas, intercambios de opiniones y unas cuantas caras feas llegamos a un buen resultado: Agosto 15 sería el mejor día de nuestras vidas. No podía perder el tiempo y junto a mi mejor amiga y mi prima favorita (tengo que llamarlas, podríamos tomar algo el fin de semana...) empezamos a ver todos los preparativos. Salón, invitados, invitaciones, iglesia, pastel. (Mmm... qe vamos a cenar mi amor? no se te antojan unas quesadillas o unos tacos? -- Nena deja de pensar en comida estabamos en otro tema... aún es temprano.) Todo era perfecto!

Llegó el día esperado y yo estaba inpaciente. Me desperté muy temprano a pesar de haber pasado una agradable noche con mis niñas, nos bañamos y nos fuimos al salón. Jesus y Julio nos esperaban para arreglarnos y cuando llegamos una canción inspiradora para el momento: Helter Skelter! wow... Mientras me peinaban me emocionaba mas pues el momento estaba cada vez mas cerca.

Por fin, mi llegada a la iglesia fue lo más exitante que me haya podido suceder en la vida. Llegue en un Mustang '68 convertible, rojo cereza, vestiduras de piel color hueso. (¿De qué otra forma podría llegar a mi boda?) Una gran alfombra en rosa pastel desde la puerta del auto hasta las escaleras de la entrada de la iglesia; yo, parada justo en el inicio de la alfombra y, tocando dentro de la iglesia la tipica tonada de boda... Me tomé del brazo derecho de mi padre y con mi mano izquierda sostuve mi ramo. Caminamos por la alfombra, subimos las escaleras y entramos a la iglesia. No pude evitarlo, me traicionaron mis emociones i solte unas cuantas lágrimas. Te ví al final del pasillo y sentía las miradas de todas las personas que habían asistido a nuestro día. La misa fue hermosa, maravillosa; no podía esperar algo mas perfecto.


--Te das cuenta que todo lo que nos ha pasado lo describes como perfecto?
-- ¿De qué otra forma puedes describir un amor puro como el nuestro? Un amor que ha traspasado barreras, obstaculos; que sigue y que nació de una forma hermosa?
-- Y, a todo esto princesa... ¿Por qué comenzó la platica?
-- Pues me acordé de mi vestido de novia.
-- Jamás lo mencionaste...
-- Debí haberlo olvidado, podemos ir a cenar ahora? :D




Edith Rangel.

No hay comentarios: